Escucha, siente tu cuerpo

Creo que todas las personas tratamos de mejorar, de adquirir nuevos hábitos o retomar la construcción de actividades que nos traiga un bienestar.
Vivimos acelerados, estresados, preocupados por el futuro, sin disfrutar el presente ni el instante que justo estamos viviendo.
Las tecnologías nos absorben, casos irremediables de enajenación por las redes sociales (por suerte no es mi situación) y en todo estamos menos en el aquí y menos sintiendo y escuchando nuestro cuerpo.
¿Qué hay en tu cuerpo? ¿Qué le molesta? ¿Qué le agrada? ¿Por qué lo sometemos a tantas actividades y no somos capaces de sentarnos cinco minutos y escuchar su dolencia o su incomodidad?
Cuando por fin llegamos a casa y nos tiramos en la cama y el cuerpo siente placer, ¡siéntelo! ¡escucha que te está agradeciendo porque le pusiste atención!
La historia es larga. Cuántas veces te pide de comer y lo evitas para seguir trabajando, cuántas veces te pide agua y no lo hidratas.
Llevo casi un mes, haciendo actos que hagan que mis vértebras estén más sanas y los dolores de espalda sean menos dolorosos. El punto es que aún no logro escucharlo, lo estoy sintiendo poco a poco pero mi cuerpo estuvo tanto tiempo sobrecargado que la tarea es mucha y se requiere mucha paciencia y pasitos pequeños, constantes y con mucha disciplina.

Por lo pronto, sigamos disfrutando del café y de su exquisito sabor y aroma. ¡Luz!


Comentarios

Entradas populares